lunes, 3 de noviembre de 2008

Luis Eduardo Aute-Entre amigos


Dándole vueltas a los discos perdidos traigo aquí uno de ellos; un disco que desde luego yo nunca perdí; que guardo con gran cariño y con un poquito de nostalgia. Hablo de un vinilo, un doble álbum con su carpeta, con sus letras en cartulina aparte, y con ese sonido tan particular que ahora ya no es admisible y que le da un encanto especial. Un atractivo que además se amplifica por el efecto de estar grabado en vivo; por ser la reunión de grandes músicos que acompañan a uno de los mejores cantautores que tenemos y que así le dan título al álbum: Entre Amigos de Luis Eduardo Aute.

Fue editado por Movieplay en 1983; todas las canciones compuestas por Luis Eduardo Aute, a excepción de cuatro, cada una de las cuales, de la manera más elegante y cortés, va encabezando las caras de ambos discos.

Reproduzco aquí el texto que el autor escribe en el interior de la carpeta:

“Este disco se grabó el 4 de marzo de 1983 en el teatro Salamanca de Madrid con el ánimo de reunir en un solo disco- en este caso dos- algunas de mis canciones más conocidas, desde las primeras hasta las más recientes, tal como suenan en directo, por una simple necesidad de hacer recuento y punto y aparte. En alguna etapa de la preparación del proyecto, también sentí la necesidad de reunir para este concierto a los compañeros de la canción, que por diversas razones, más quiero y admiro. Con cada uno de ellos he compartido momentos muy significativos de mi vida que aún permanecen vivos en mi memoria, como así sus voces en este disco”

Quizá la publicación de este concierto fue un punto y aparte, pero esas canciones siguen muy vivas y actuales, perduran con la misma fuerza que tenían hace 25 años, tal como aparecen en ese disco. Muchas de estas canciones fueron recogidas de nuevo en un doble CD, que lleva por título “Autorretratos”, publicado 20 años después. También muchas de ellas han servido para rendirle un homenaje al cantautor en un disco que se llama “Mira que eres canalla, Aute!” publicado en 2000, y donde otros artistas ponen sus voces al servicio de las canciones de Aute. Además de los que le acompañaron en “Entre Amigos”, es una delicia escuchar las versiones presentadas, entre otros, por Pedro Guerra, Leon Gieco, Jorge Drexler, José Mercé, Rosendo, Ismael Serrano, Javier Álvarez.

Y volviendo a “Entre Amigos”, es un trabajo con múltiples encantos, entre ellos está el poder escuchar a L. E. Aute cantar canciones emblemáticas de sus compañeros en el concierto: “Te doy una canción” junto a Silvio Rodríguez, “Para Vivir” junto a Pablo Milanés y una de las más preciosas canciones de amor que yo pueda conocer, “Paraules d’amor”, con el incentivo de hacerlo en catalán junto a Joan Manuel Serrat.

Muchas veces he escuchado decir que las canciones nos llegan en la medida que las hacemos nuestras y así lo creo. Hablar de las canciones de este disco es hablar de la memoria sentimental de una generación, o más bien de varias; porque todas ellas son más que canciones, son parte de la vida y de la historia de mucha gente. Sería un descaro por mi parte hablar de ellas de otra manera que no fuera desde el interior, no podría comentar las canciones en sí, sólo podría hablar de su significado para mí. Y tampoco de esta manera me atrevería, no sé que podría yo decir de “Pasaba por aquí”, de “Rosas en el mar”,de “Aleluya”, de “Las cuatro y diez”, de “A por el mar”, de “Queda la música”, o de “Anda”, y como podría explicar el sentido de canciones como “De paso” o “No te desnudes todavía”, “Siento que te estoy perdiendo” y “De alguna manera” o “Al Alba”, sin olvidarme de “Mira que eres canalla”.

En ellas vive un tiempo inolvidable para todos los que conocimos las canciones de Aute y las incorporamos a nuestras vidas. Y aunque esté escribiendo sobre ellas, estas canciones no son para comentarlas, son para escucharlas y para sentirlas; creo que aquellos que las conocen me darán la razón. Luis Eduardo Aute es una figura fundamental en la Canción de Autor, y este disco que se reeditó en CD en 2002 es una pieza clave en su discografía.

Canciones del disco:


Te doy una canción
Rosas en el mar
Aleluya nº 1
Rojo sobre negro
Las cuatro y diez
Amor, te digo esta palabra
Recordándote
El ascensor
Paraules d' amor
A por el mar
Queda la música
Albanta
De paso
Al alba
Padre
A vivir
Anda
No te desnudes todavía
Libertad
De alguna manera
Pasaba por aquí
Para vivir
¡Mira que eres canalla!
Dentro
Siento que te estoy perdiendo
Anda suelto Satanás
Entre amigos


Mª Gracia Correa

jueves, 30 de octubre de 2008

Estación Norte-Estación Norte



Volviendo a darle la razón a mi querido amigo Víctor Alfaro, cuando dijo –acertadamente por supuesto- que esta era la bitácora de los discos perdidos; razón que yo le había querido quitar en el comentario de Rebeca Jiménez, pues, una vez más, y para regocijo de Víctor, voy a comentar un disco difícil de encontrar aunque no imposible.

Estación Norte publicaron este disco, primero y único, en 1999, tras haber participado en el mítico disco colectivo “Cantautores: La nueva generación” con un par de canciones. El grupo integrado por Nerea Sáenz, Carlos Aguado y Gabriel de San Juan, entregó al juicio del público y de la crítica este trabajo que yo encontré algún tiempo después de su publicación, por casualidad, topándome con él en los cajones de cartón de una pequeña tienda de discos madrileña. Debo confesar que, como no tenía ni idea de quienes eran, pues compré el disco por dos razones muy poco románticas: primero porque era muy barato y segundo porque me parecieron muy agradables esos tres rostros sonrientes de la portada, así de sencillo.

Aunque de lo que cuento parece deducirse que el grupo ya no existe, es preciso indicar que actualmente Nerea y Carlos Aguado siguen con un proyecto común similar, solo que han cambiado de nombre. Ahora se hacen llamar Marte Menguante. Realmente del grupo apenas sé nada, que han hecho canciones para alguna serie de televisión... que Nerea no es de Madrid, sino del País Vasco, aunque esté afincada en la capital de España; y bueno, a Carlos Aguado sí que le conozco algo más, puesto que le he visto tocando la guitarra muchas veces, con la elegancia y eficacia que le es inherente, con Luis Felipe Barrio y Matías Avalos.

Volviendo al disco, es de notar la producción “bipartita”, pues, por un lado, la mitad de las canciones cuentan con la buena mano del maestro José A. Romero, y por otro, la otra mitad cuentan con la notable producción de Luis Gómez Escolar y Juan Ignacio Cuadrado. Y entre los músicos, por ejemplo, es digno de mención Fredi Marugán, que ha tocado con muchísima gente y en la actualidad está con Ismael Serrano; y también Paco Bastante, Andreas Prittwitz, Tino di Geraldo… sólidos músicos todos ellos curtidos en cientos de batallas musicales. A pesar de las dos producciones encargadas a productores diferentes, misteriosamente, el disco guarda una unidad de sonido que, para nada confunde al oyente, sino todo lo contrario, le hace disfrutar de una fluida coherencia sonora, incluso pese a que la inclusión de algunos instrumentos menos habituales pudiera hacer pensar lo contrario. Quizás eso se deba en gran medida a méritos del propio trío, con la encantadora sencillez de la voz, levemente nasal, de Nerea, siempre presente, o los juegos vocales que rondan todas las canciones del disco.

Es un disco de esos que tienen como rara y principal virtud, que pueden, casi me atrevería a decir que deben, ser escuchados en esas tardes lluviosas otoñales o invernales; en una habitación vacía de gente, con una buena taza de café o de té caliente entre manos, y, a ser posible, con una amable chimenea encendida. Bebidas las canciones a tragos largos e intensos, acercándonos de cuando en cuando a la ventana para contemplar -lánguidamente- como la gravedad cumple escrupulosamente su adusta ley, con las acuáticas perlas que caen de un cielo lóbrego hasta la calle o la tierra. Estoy convencido de que, en este sentido, esta música debe poseer algún tipo de propiedades curativas; tras una escucha así uno sale como mínimo fortalecido en su salud, física y mental.

¿Mis favoritas? Pues “Ojos tristes” distinguido ejercicio de pop de autor y “Tierra” delicada y hermosa tonada a las raíces de Nerea.

Canciones:

1.- Especie suicida
2.- Frío
3.- Cinco días de invierno
4.- Madrid descansa
5.- Ojos tristes
6.- Canción para volver
7.- Donde florecen los sauces
8.- Jugando
9.- Tierra
10.- Puertas blancas
11.- Sin pijama
12.- Letanías del desamor
13.- Especie suicida (acústica)




abuineitor







viernes, 19 de septiembre de 2008

El Último de la Fila-Enemigos de lo ajeno



Aunque creo que jamás EUDLF se autodenominaron cantautores, su propuesta me parece tan cercana al mundo de los mismos, que no me resisto a comentar uno de sus discos. Éste en concreto, que fue su segundo vinilo –aunque por ahí dicen que el tercero es mejor (yo disiento)- representa para mi una de esas obras imprescindibles en la historia de la música popular española.

Pero hagamos un poco historia. En España allá por la segunda mitad de la década de los años setenta apareció un disco de un grupo del sur que mixturaba música de rock progresivo (que era la moda mundial de entonces) con elementos tomados del flamenco. El resultado era original y con calidad y supuso un éxito que provocó que todas las discográficas se apresuraran a mirar debajo de las piedras para buscar grupos de características similares que pudieran competir o al menos sacar provecho del éxito de Triana, que así se llamaba el grupo del que hablo. La prensa –supongo- bautizó al fenómeno como rock andaluz, estilo que vivió prácticamente lo que duró la carrera de Triana hasta que muriese en 1983 uno de sus pilares fundamentales: Jesús de la Rosa.

Apenas dos años después, irrumpen, porque eso fue lo que hicieron, entrar en la actualidad musical como un ejército recién arengado por algún general visionario; irrumpen, como digo, Manolo García y Quimi Portet, con su proyecto común, extraño e innovador pero con evidente influencia de aquel rock andaluz que acababa de dejar de estar en el candelero. Curiosamente, nuestros dos protagonistas residían y eran de Cataluña, no eran andaluces.

Lo mejor de EUDLF y de este disco claro, es que en 1986 nadie, pero lo que se dice nadie, sonaba así: con esa estrafalaria mezcla de folk, pop, flamenco, música árabe, rock, toques experimentales, surrealistas incluso y unas letras sentidas y en no pocas ocasiones de una belleza abrumadora. En las letras encontramos, por un lado, la poesía y la influencia de la filosofía budista zen que creo es aportación de Manolo; por otro, los sencillos y preciosos textos de las canciones de amor de Quimi. No quiero comentar ninguna de las letras del disco porque las diez que lo conforman rebosan clase y maestría por los cuatro costados. Es de esos pocos discos que pincho en mi equipo de música y veo que soy capaz de cantar casi sin errores de principio a fin: no digo más.

Otra cosa que siempre he admirado ha sido la producción –del propio dúo- que rozando lo casero, pues se grabó en unos modestos estudios para la discográfica PDI, muestra un gran derroche de imaginación y de inteligencia en el uso de los limitados recursos de que disponían para grabarlo. De hecho, prácticamente todo está grabado por Manolo y Quimi que se ocupan de casi todo lo que suena: ruidos, voces, graznidos y demás efectos incluidos. Como curiosidad es preciso decir que poco después, dado el tremendo éxito del dúo, se fueron a Londres a volver a mezclar un surtido de canciones tomadas tanto de éste como del primer disco, que editaron bajo el nombre de “Nuevas mezclas”. Personalmente creo que se podían haber ahorrado el viaje, porque aunque las mezclas son correctas, se cargaron toda la espontaneidad y gracia de las mezclas originales. En fin, cosas del esnobismo de la época. Era costumbre –porque daba prestigio aunque grabaras en un cuchitril- irse fuera a grabar discos, como si en España no hubiese entonces buenos estudios, buenos técnicos y buenos músicos.

La historia de EUDLF termina en 1995 -tras la edición de siete magníficos discos- en que los dos componentes del dúo dan por acabada la andadura que comenzaron juntos. Por separado, Quimi ha editado varios discos en catalán, fiel a sus peculiaridades como autor-productor, y, Manolo, ha continuado con una carrera tan exitosa, como la que disfrutó junto a su compañero, aunque más predecible y reiterativa en unos esquemas, en mi opinión, ya agostados; carrera, por cierto, en la que paradójicamente, debe buscar hueco en las emisoras de radio entre la legión de torpes imitadores que le han salido: remedos que en su mayoría no le llegan ni a la suela de los zapatos.

Bueno, no me quiero extender mucho más. Solo recomendar a cualquier aficionado a la música que si no se ha acercado a este disco que lo haga porque es de esos cedés que hay que tener y escuchar con suma atención. Es una obra maestra, o eso me parece…

abuineitor

miércoles, 25 de junio de 2008

Tontxu-Corazón de mudanza



La discografía en solitario de Tontxu , hasta el momento, está formada por seis trabajos: Se vende (1997), Corazón de mudanza (1998), Con un canto en los dientes (2001), Básico (2003), Contacto con la realidad (2004) y Cuerdas vocales y consonantes (2005).

El único que no tengo es el último, Cuerdas vocales y consonantes, pero para quien tenga interés, puede escucharse casi en su totalidad en la página web del autor. De todos los discos, los que más conozco son Corazón de mudanza y Con un canto en los dientes, en ambos incluye canciones que me gustan especialmente, pero hablaré de Corazón de mudanza ya que es lo primero que conocí de Tontxu. El propio autor indica en su web que éste es el trabajo que menos acusaría el paso del tiempo, debido a lo atemporal de sus arreglos y contenido, agradeciendo esta cualidad al músico y productor Julio Pereira, que colaboró con él en este trabajo.

Si no recuerdo mal, las canciones incluidas en este CD, que se hicieron más populares, fueron "Treinta y tantos" y "Corazón de mudanza", ambas hablan de separaciones y comienzos, para mí unas letras muy acertadas en las que sabe describir a la perfección tales situaciones.

Me gustaría destacar "Gila", dedicada a ese artista, le hace un gran retrato, supongo que quien no conozca el humor de Gila no podrá entender de ninguna manera la canción, pero quienes disfrutamos de sus pequeñas historias, tan absurdas e inteligentes, podemos igualmente disfrutar de esta canción, que empieza con una de sus historias imposibles:

Nació, no había nadie en casa
y él nació.
Y con razón, su madre se enfadó:
"No quiero que se repita, y nazcas
cuando yo no estoy"…

Es un homenaje precioso, con un estribillo que lo resume de maravilla:

Camisa roja como el corazón,
tu vida se merece una canción,
tus cintas guardo en un cajón

En realidad este disco me gusta casi al completo, todas las canciones tienen su punto, otras dos que destacaría son "Mientes" y "Madrid-Barcelona":

Ojalá que el destino me vuelva a traer,
yo prometo llamarte, no lo olvidaré
que lo tuyo y lo mío me huele ‘molt bé’
todavía no la he vuelto a ver.

Pero aunque esté hablando de Corazón de Mudanza no quiero dejar pasar una de las canciones de su disco Con un canto en los dientes, que tiene mucho de especial para mí y seguramente para todo el que se pare a escucharla, "Que haría yo sin ti" que la dedica en su disco a Marina Rossell, a Rogelio Botanz y a Violeta Parra, porque ¿Quién no tiene que darle gracias a la vida?...

Y para terminar, vuelvo a Corazón de mudanza con una última canción, que como el cantautor explica: "Puedo ser yo, puedes ser tú, pero seguramente será otro. A Libertad 8, es "Aplausos", y que a mí me gustaría dedicarle (con permiso del autor) a todos los amigos que he tenido la suerte de conocer y que se dedican a eso de hacer canciones:

Tuvo la suerte de encontrarse una guitarra en el salón,
y el misterioso don de darle vida a una canción,
el miedo de cantarla un día desapareció,
y a base de enfrentarse con el público aprendió.
Entonces llegaron las flores y regalos
lo bueno y lo malo que tienen los aplausos.
Tuvo y todo lo que tuvo lo ha dejado de tener,
pero a pesar de todo no dejó de componer,
anoche me contó que ha terminado una canción,
que nadie por desgracia escuchará y es la mejor..

Corazón de mudanza está publicado por EMI-ODEON S.A. en 1998. Todos los temas compuestos por Tontxu.

Canciones del disco:

Que fue aquello
Treinta y tantos
Temprana
Madrid-Barcelona
Corazón de mudanza
Mientes
Aplausos
Gila
Todos dicen te quiero
Copas en un bar

María Gracia Correa

viernes, 20 de junio de 2008

Rebeca Jiménez-Todo llegará


Una vez dijo el genial Víctor Alfaro que ésta era la bitácora de los cantautores perdidos (o algo así). Sin quitarle ni un ápice de razón –que la tiene- este comentario va a desmentir esa apreciación, espero, porque va a tratar de una de las novedades de este año 2008, de mayo, nada menos. Y es por culpa, o mejor, gracias a Víctor, que yo he descubierto hace bien poco a esta cantautora segoviana, afincada en Madrid.

 

Este es un disco de estreno de un carrera, confiemos que larga, como cantautora, de alguien que ya lleva tiempo tocando e incluso trabajando para músicos de diverso pelaje. Lo primero que llama la atención es la portada: un magnífico retrato en blanco y negro del perfil de Rebeca Jiménez que ya anuncia un fuerte carácter. Una melena lacia y algo salvaje; una mirada perdida, unos labios agridulces; una frente ancha e inteligente como para colmarla de besos paternales y una nariz con una vigorosa personalidad, solo comparable a la que tiene su sólida y rota voz, siempre cabalgando por encima de un porfiado piano que ella misma se ocupa de tocar.

 

Es curioso porque lo que más me gusta de ella, su hechizante y fascinante manera de cantar, parece una especie de evolución personal tras la escucha de intérpretes muy significadas que no enumeraré. Y lo comento, porque hace tiempo (en you tube se puede ver) Rebeca hizo una versión de “Chica de ayer” de Nacha pop, que no tiene nada que ver con lo que a día de hoy ofrece: sonido americano a raudales, algo de rock y soul de manual y mucha pasión y credibilidad en lo que cuenta y en lo que canta.

 

Pese a que con este disco creo que se inicia un más que prometedor discurso vital-musical, estoy convencido de que a Rebeca le queda todavía mucho camino que recorrer (especialmente como letrista) y muchas sorpresas musicales que regalarnos.

 

1. “No sé si lo hice bien” 

2. “Antes de marchar” 

3. “Te queda mi amor” 

4. “Despertarme contigo” 

5. “Tú o nadie” 

6. “Calada hasta los huesos” 

7. “Nada importa tanto” 

8. “Todo llegará” 

9. “Nefertiti blues” 

10. “Avión en picado” 

11. “Para volar” 

12. “Me emborraché de ti” 

13. “Acaba de empezar” 

 

Mi corazoncito se siente subyugado con canciones como “Te queda mi amor” que me recuerda a los Fleetwood Mac en su feraz etapa matrimonial; o con “Nefertiti blues” que tiene una atmósfera tan densa que se podría engullir a cucharazos cual papilla infantil (bravo por Rebeca y por el batería).

 

La eficaz y algo cruda producción corre a cargo de Carlos Raya, productor (y guitarrista) habitual de Quique González. Las tomas (¡bien!) en directo en gran parte; con entregados músicos acompañando, aunque, a veces, se echa de menos alguna que otra sorpresa en forma de instrumento,  o que en las baladas, por ejemplo, el guitarrista –que no es Carlos, creo, sino su hermano Mario- utilice algún efecto distinto del trémolo.

 

Y sí, ya sé que Rebeca cantó en “Kamikazes enamorados” el disco más desabrido y atribulado de Quique González, pero no se parece a él cantando como dicen por ahí, sino a Carlos Chaouen... o eso me parece a mi.


abuineitor

 

domingo, 1 de junio de 2008

Amancio Prada-Navegando la noche

Caballo blanco
Novia de leche
Rey de tu vientre
Mariposa
Tengo en el pecho una jaula
Otoño
Vieja dama
Semáforo
Almohada

Algunos cantautores pueden contar en su anecdotario personal que han conocido a fulanito o a menganito, o que han cantado cumpleaños feliz a zutanito; sin embargo, pocos pueden presumir de haber compartido escena con el mismísimo George Brassens (en 1973), padre de la canción de autor moderna. Bien, pues Amancio Prada pertenece a esos pocos privilegiados.

Este dato por sí solo ya nos da una idea de la calidad del personaje del que estamos hablando. Así lo han visto aquellos que han reconocido en su obra un gran talento y un perfeccionamiento sin igual, y le han otorgado, consecuentemente, meritorios premios y reconocimientos a lo largo de su ya lata carrera.

No obstante, como aquí de lo que se trata es de comentar discos, no vamos a enumerar sus merecimientos. Y por lo tanto, voy a comentar un disco con el que me he tropezado casi por casualidad hace escasamente una semana, aunque fue editado en 1988. Este disco tiene la peculiaridad de que no hinca sus puntales en textos de poetas clásicos como ya hiciera antaño Amancio con San Juan de la Cruz, Federico García Lorca o Rosalía de Castro; sino que nace como resultado de una feraz colaboración con el conocido escritor y columnista de diarios y revistas Manuel Vicent.

Según tengo entendido, las letras tienen su origen –precisamente- en columnas escritas y publicadas en un periódico con anterioridad, y son elaboradas por ambos, cantautor y escritor, para convertirlas en canciones. Lo que en principio puede parecer una tarea singular y un punto ímproba, pues sorprendentemente arroja como resultado unas canciones espléndidas, tinturadas de una melancólica poesía urbana que la meliflua y saudadosa, valga la palabra, voz de Amancio no hace sino acentuar. Y menciono esto porque la gran protagonista de la grabación es la ciudad, no importa en realidad cual, vista con los ojos de quien la conoce bien y la ama, así como ama a los distintos personajes, de muy diferente pelaje, que la habitan y le dan razón de ser en suma. Tema este, perfectamente amalgamado y trabado con una música siempre elegantísima y suavemente pop; ornada con dulces guitarras y suaves percusiones por encima de las cuales reina una voz contenida pero extraordinaria: la siempre prudente y tierna voz de Amancio.

Curiosamente el disco se llevó al directo por parte de los dos autores, escritor y cantautor, en la Universidad de Málaga, combinando la lectura de los textos originales con la interpretación de las canciones en que se convirtieron. Una propuesta muy particular, muy especial sin duda, y a la que lamento no poder haber asistido.

Esta vez no quiero comentar las canciones porque tras escuchar repetidas veces el disco (cd) he llegado a la conclusión de que es mucho mejor ir descubriendo las delicias musicales que oculta lo más libre de juicios o prejuicios posible, de la manera más inmaculada posible. Y vale. Que suene la música...

abuineitor

martes, 13 de mayo de 2008

Joan Manuel Serrat-Cançons tradicionals



El testament d'Amèlia
La presó del Rei de França
El comte Arnau
La cançó del Lladre
L'estudiant de Vic
La Dama d'Aragó
El ball de la civada
Cançó de batre
El rossinyol
La presó de Lleida



Cuando te cansas de leer que el colectivo Els Setze Jutges despreciaba el folklore catalán como fórmula de expresión, debido a la utilización que el régimen hacía de él para demostrar la cohesión de España a través de sus diferencias, y te encuentras con este álbum, uno de los primeros de Serrat, te das cuenta que conviene revisar los conceptos. Cançons tradicionals es un álbum compuesto en su integridad por canciones tradicionales en lengua catalana, la mayoría de Cataluña, pero interpretadas sin ningún tipo de aditivo político, ni siquiera regionalista, a primera vista, como hizo Josep Maria Espinàs, uno de los fundadores e ideólogos de los Jutges, con la tonada de "El mariner" ("A la vora de la nit"). Por otro lado, no son interpretadas estas canciones al modo tradicional, sino que se les añade el acompañamiento normal que solía tener la música inicial de los cantautores de este colectivo, es decir, además de la guitarra de Joan Manuel, una pequeña orquesta dirigida por Salvador Gratacòs y con los arreglos de Antoni Ros-Marbà: 8 violines, 3 violas, 2 violoncelos, un contrabajo, 2 flautes, una flaute dulce, un clarinete bajo, oboé, cuerno inglés, fagot, 3 trompas, 2 trompetas, un trombón, una tuba, 2 fiscornos, tenora, tible, arpa, piano y percusión. El resultado es una música tranquila y agradable, a veces melancólica y otras alegre como contrapunto perfecto a la nostálgica voz de Serrat. El disco cuenta además, en su carpeta interior, con un resumen teórico de la canción tradicional catalana y notas a cada una de ellas escrito por Oriol Martorell. Cançons tradicionals se puede considerar un disco de folk, en cuanto que se trata de la re-interpretación del cancionero tradicional y popular catalán, y no una simple interpretación al estilo de la música de raíz que por entonces había comenzado Joaquín Díaz con el cancionero castellano. Por otra parte, tampoco se trató de realizar una reinvención musical total de estas canciones, sino de añadirles un acompañamiento más sinfónico. Encontramos en el disco canciones tradicionales y/ o populares catalanas de distintos tipos: romances históricos, canciones de trabajo, bailes campesinos, tonadas populares, con toda la sabiduría popular que esto conlleva.

Romances:-"El testament d'Amèlia" es un misterioso romance histórico que nos cuenta la historia de una joven princesa que enferma de amor porque su marido le es infiel con la madre de ella. Según Martorell, por una palabra que se dice en el texto, la desafortunada princesa podría ser Mahalta o Mafalda, nombre que correspondía a la mujer de Ramón Berenguer, Cap d'Estopa, y a la hija de Ramón Berenguer III.

-"La presó del rei de França" cuenta, por su parte, el histórico apresamiento de Francisco I, primo de Carlos I, tras su derrota al intentar la invasión de España cuando disputaba con Carlos V su derecho de sucesión al Imperio Alemán. Se trata de una reinterpretación de los sentimientos del rey francés y de su esfuerzo para liberarse enviando un mensaje a su esposa para pagar el rescate. Esta canción viene acompañada por un acompañamiento musical victorioso y marcial, propio de las marchas militares y de las marchas reales.

-"El comte Arnau", una canción cuya supuesta antigüedad quedó rebatida por la investigación, narra por su parte, con un excelente aire medieval trovadoresco, cómo el fantasma del conde Arnau, muerto en batalla, visita a su esposa y mantiene un diálogo con ella, pidiéndola dejar que se llevara a una de sus hijas para mitigar el sufrimiento del otro mundo, penas que se las ganó bien en vida y que tendrá que pasarlas en soledad, como le sermonea la condesa. Este tema fue tratado en poesía por gente tan importante como Joan Maragall y Josep Maria Sagarra.

-"La dama d'Aragó" es, tal vez, a mi parecer, una de las mejores canciones del disco, y, por extensión, una de las que mejor interpreta Serrat. La información que ofrece Martorell no desvela la identidad de tan misteriosa y bella señora, salvo por un verso que dice que es hija del rey de Francia y hermana del de Aragón. El texto es de una belleza incalculable, dotando a la descripción de la esbelta dama los caracteres propios del sol, e insistiendo en el amor que despertaba en todo aquel que la rodeaba, incluido su propio hermano.

Canciones populares y de trabajo tomadas de aquí y de allá de la amplia geografía de habla catalana, Serrat nos canta algunas de las canciones más populares de Cataluña, todas ellas bien conocidas por etnólogos, etnógrafos y musicólogos:

-"La cançó del lladre" (la canción del ladrón) es una historia narrada en primera persona sobre un ladrón desde su más tierna y holgazana infancia. El refrán "Adiós clavel morenito, adiós estrella del día" se nos revela sólo al final, cuando nos cuenta que ha sido condenado a muerte, y la canción adquiere el sentido de ser una confesión de arrepentimiento voluntario ante lo inminente.

-"L'estudiant de Vic" (el estudiante de Vic) es una de aquellas tantas canciones que abundan en la música popular de todo el mundo, dirigidas a adoctrinar a las hijas con su moraleja final. Nos cuenta de cómo una viuda queda enamorada de un estudiante, con la oposición del padre de ésta, y queda embarazada de él, pero éste huye. La moraleja final venía a decir: "Niñas que venís al mundo, no os fiéis de gente de libros"; parece ser, por las notas de Martorell, que el estudiante era un tipo social de la Edad Media, que se debatía entre el mundo clerical y el seglar.

-"El ball de la civada", el baile de la cebada, es una canción de trabajo que después se transformó en baile en las fiestas que celebraban el final del tiempo de la cosecha. Mucho más tarde se convirtió también en danza indispensable en los salones de la burguesía catalana, y llegó finalmente al siglo XX como una danza de juego infantil.

-"Cançó de batre", canción de carro, es una tonada popular de trabajo que se ha conservado con mayor pureza en Mallorca. Se canta a capella, con una extraordinaria técnica vocal, como en todas las canciones de este tipo, y así nos la canta Joan Manuel, desintrumentalizada y conservando los "¡arre!" (arri!) que se supone lanza el cochero a su mula mientras canta y conduce su carro.

-"El rossinyol", el ruiseñor, es la mejor canción de todo el disco, por su acompañamiento musical, por la cuidada interpretación vocal de Serrat y por lo delicioso de la letra. El tema, clásico donde los haya, es el de la muchacha mal casada y a la fuerza, que le da a un ruiseñor un mensaje para su madre, pues ha perdido el rebaño que su marido le hizo cuidar y con el que su padre la hizo casar a la fuerza. Es el típico tema de desesperación ante una situación insoportable.

-"La presó de Lleida", la prisión de Lérida, es la canción que cierra el disco. Con un acompañamiento fúnebre, nos cuenta de cómo la hija del barón se conmueve al oír la canción de los presos y pide su indulto al padre. La canción tenía otras variantes, siendo una de las más famosas "La presó de Napols". Si, tal vez, haya en el disco alguna canción con intención política, sin duda es ésta, en lo tocante a los presos políticos: se podría argumentar que no, porque la letra de la canción es así y no tiene ningún añadido; pero se podría argumentar también que sí, porque fue el propio Joan Manuel Serrat el que decidió cantar esta hermosa canción: no sería la primera, ni la última vez, en que un cantante en lugar de crear un texto de protesta cogiera para la misma finalidad un texto antiguo tradicional o popular, asegurándose de esta manera escapar, aunque fuera en cierta medida, a la censura y a la sospecha. Pero si tal vez Serrat no quiso darle ninguna intención política, sí se la dio Marina Rossell cuando tomó en 1970 esta canción y la cambió la letra, sustituyendo a la hija del barón por el carcelero (y cambiando así totalmente el sentido de la canción) y al barón por el gobernador.

En conclusión, si bien el disco, raro, podríamos decir, en comparación con toda la discografía de Serrat en general, no supone un grupo de canciones reivindicativas, ni una reinvención de la canción tradicional, sino una interpretación tal cual, pero sin caer en el purismo propio de un cantante de música de raíz, constituye un buen y gran trabajo, agradable y delicioso al oído.

Gustavo Sierra

martes, 6 de mayo de 2008

Josep Andújar "SE"- Agulles de cap




“No abandonis mai
l´infant que portas dintre”

Este disco es el último trabajo, hasta el momento, de un cantautor que descubrí hace unos años. Sólo quien lo busca lo puede encontrar, no sale mucho de su tierra, Sant Feliu de Guíxols, en Girona. Él mismo cuenta que trabaja solamente para quien lo quiera escuchar.

Las canciones de este autor siempre están impregnadas de aires marineros, de hecho, tomaré las palabras con las que se presenta este disco en su página web, dice que en el fondo, Josep Andújar es un pescador con una guitarra en las manos que hace uso de su capacidad de comunicar con palabras sencillas, unidas a una armonía que transporta con su principal instrumento, una voz cálida y grave. Es una buena manera de definirlo, quien conoce su música sabe que es así. Aunque utiliza una gran cantidad de estilos musicales, todas sus canciones llevan un sello propio y personal.

Quizás las canciones que más lo caracterizan en general son las que se pueden enmarcar en lo que se llama “Canción de taberna”, también las habaneras o las canciones con tintes irónicos y en las que crea un ambiente de complicidad con su público son muy propias del artista. Para mí, sin embargo, lo fundamental de este cantautor es lo que se podría catalogar como sus “viajes interiores”, cuando habla de despedidas y reencuentros, de amores perdidos y desamores, de soledades, del destino que cada uno se busca y sobre todo del mar.

Cuando yo lo conocí hacía poco que había publicado su disco “Confessions d´un solitari” (2003), me hizo gracia la confesión que se hacía en el estribillo del tema principal: “Confessions d’un solitari que passava per aquí, que ha buidat l’abecedari per quatre coses que ha escrit.”

Me gustó el trabajo, y ya busqué toda su discografía, que está compuesta por una maqueta “Ho he fet per tú” (1995) que incluye una canción (Pare Joan) grabada en 1984 junto a Josep Mª Bardagí, y cuatro trabajos publicados, el primero de ellos en 1999. “Viatge interior”, es mi preferido, en ese disco está incluida una canción para mí muy especial, que siempre llevo en mi mp3, “No sé si t´han dit” que viene a ser algo así como “No se si te han contado…”, el siguiente fue publicado en 2001 “Minuts impossibles”.

“Agulles de cap” fue editada en Música Global Discográfica y publicada en 2005, todas las canciones con letra y música de de Josep Andújar “SE”.

Se podría decir que los temas principales son los dos primeros, Agulles de cap (alfileres), que le da título al disco, es una de mis predilectas, muy al estilo de “SE”, va describiendo una situación tremenda de ruptura sentimental, lo hace basándose en los pequeños detalles, en los restos del naufragio, cosas simples y cotidianas que son las que quedan en la memoria, lo hace empezando por el final de la historia, en un tono entre melancólico e irónico, una preciosidad con una melodía que le va a su medida:



“Avui t´he de donar una mala noticia:
on hi havíes clavat mil agulles de cap, hi neix una caricia……..
Per si aprens a volar, no la tornis a errar: busca´t un escolà que et digi que t´estima
perquè no és suficient inundar-te de temps; cal fer la pantomima.
Doncs abaixo el teló, no et demano perdó…que no estic per comèdies;
faré un cop de timó per no ser el cantautor de petites tragédies…”

El segundo tema “Amor prohibit” es la canción más llamativa, por la estética pop que utiliza, el disco incluye un videoclip con esta canción, que puede descargarse también desde su página web.

Como en todos sus trabajos, “SE” incluye algunas canciones en tono de burla, una de ellas, especialmente mordaz y que me hace reír cada vez que la escucho es “les rates”, su estribillo: “Pels replans conspiren les rates”, en ella hace una parodia de lo que se mueve por una comunidad de vecinos especialmente perversa, donde todos se conocen la vida de todos y se critican entre sí por los descansillos de la escalera…todo bajo la mirada de su protagonista, que por cierto resulta ser el “Okupa” del edificio, al que le da absolutamente lo mismo el cotilleo de la vecindad, una canción genial que da un repaso a la vida de todo el vecindario en alta velocidad.

Pero para terminar mi comentario me gustaría dejar aquí la letra completa de una canción que representa el perfil más poético y dulce del cantautor y que a mí personalmente es el que más me gusta, habla de despedidas; es una canción nostálgica, su música no podía ser otra que la que le ha puesto Josep Andújar, transporta a quien la escucha al mediterráneo y a su cultura marinera.

L’última boira, (La última niebla,)
l’últim petó (el último beso)
i a la mirada (y en la mirada)
un bri de por. (una brizna de miedo.)
L’última esquerda (la última grieta)
del nostre adéu (de nuestro adiós)
tot ho vaig perdre (todo lo perdí)
a cara o creu. (a cara o cruz)
L’última nota, (la última nota,)
l’últim acord, (el último acorde,)
l’última estrofa (la última estrofa)
d’una cançó. (de una canción.)
L’últim prestatge (el último estante)
dels meus records, (de mis recuerdos)
i una carícia (y una caricia)
morta en el cor. (muerta en el corazón.)
L’últim viatge (El último viaje)
prop del teu cos, (cerca de tu cuerpo)
l’últim t’estimo (el último “te quiero”)
partit per dos. (partido por dos)
L’última carta (la última carta)
sense segell (sin sello)
i el teu somriure (y tu sonrisa)
a flor de pell. (a flor de piel.)
L’últim missatge, (El último mensaje,)
l’últim esglai, (el último sobresalto,)
les hores trencades (las horas rotas)
i el buit de l’espai. (y el vacío del espacio.)
Pare, et duc dins del cap (Padre, te llevo en la mente)
com el vent a les fulles, (como el viento las hojas)
i tinc els ulls negats (y tengo los ojos anegados)
quan l’ànima es despulla. (cuando el alma se desnuda.)
Tot sovint m’he aturat (De repente me he detenido)
a les nostres vides (en nuestras vidas)
sé que et tinc al costat (se que te tengo a mi lado)
i que encara m’estimes. (y que todavía me quieres)

Canciones del disco:

Agulles de cap
Amor prohibit
A la llum del far
Ballant sobre la lluna
L´última mirada
Les ferides dels hams
Un planeta a la teulada
Per un instant
Borratxo perdut
Carrers petits
Com un joc
Les rates
Amor prohibit (videoclip)




María Gracia Correa

domingo, 13 de abril de 2008

Mercedes Ferrer-Entre mi sombra y yo

Podríamos enumerar muchos adjetivos laudatorios sobre esta ópera prima de Mercedes Ferrer y todos se ajustarían bastante a la realidad; que no es otra sino que se trata de un gran disco. Sin embargo, personalmente, yo daría un paso más: este disco es una (desgraciadamente poco conocida) obra maestra de la música española.


Recién aterrizada de la Sorbona parisiense llega a mediados de los 80 esta cantautora en plena ebullición nuevaolera nacional y forma un dúo/grupo con el excelente percusionista –y batería claro- Carlos Torero, llamado La Llave. Con él gana el VII trofeo de rock Villa de Madrid (como curiosidad diré que en esa edición yo participaba con uno de mis primeros grupos) e inmediatamente después surge la posibilidad de grabar un disco, situación que hará que Carlos se desvinculara del proyecto para no atarse a nadie (Carlos tocaba con muchos grupos entonces hasta que recabó en Radio Futura) y provoca el inicio de la carrera en solitario de Mercedes y la búsqueda de banda de acompañamiento. Consigue fichar para su proyecto personal a dos músicos fundamentales para la grabación del disco que comentamos: Fernando Illán bajista que ya había colaborado en La Llave y José Antonio Romero guitarrista de muchos grupos y solistas (entre otros Hilario Camacho o Joaquín Sabina) que provenía del grupo Quinto Congreso. Para rematar la faena, el percusionista y co-productor del disco junto a Carlos Narea será Sergio Castillo.


El resultado de este récipe musical, con el ingrediente esencial de la propia cantautora por supuesto, es una fórmula magistral, inusitada y muy inteligente, extravagante y perfecta, extraña, y, en cierto modo, arrebatadoramente turbadora. Las canciones se nutren de diferentes pinceladas estilísticas trabadas de una manera ingeniosa e imprevisible: sonidos de jazz, de rock, ambientales, electrónicos, pop elegante, funk salvaje, vanguardia contemporánea, reggae, etc. Todo ello arreglado con unos fogosos bajos, unas desquiciadas guitarras y unas aguerridas baterías que son la tramoya y el lecho, la lógica orgía sonora para que la sublevada voz de Mercedes construya unas difíciles y audaces melodías.


EL GOLPEADOR /
EL ARTE DE ANDAR/
LOU SALOMÉ /
TODOS LOS GRITOS /
EUROPA /
EL MIEDO A LAS OLAS /
A SANGRE FRÍA /
ENTRE MI SOMBRA Y YO /
ZULEMA /
COMO UN CAMALEÓN /
CREENCIA Y CAÍDA/


En las letras se nos habla -en general- de forma algo errática y deliberadamente imprecisa, de sentimientos muy humanos; de boxeo, de una modelo alcohólica, de Lou Andreas Salomé: personaje femenino decimonónico que compartió amistad y más cosas con Nietzsche, Rilke, Freud, etc... de Europa, de ciudades, de filosofía personal... En concreto, aunque todo el cancionero es de un magisterio que aturde, no puedo resistirme a indicar las canciones que más me fascinan: "El arte de andar" esa historia de autodestrucción con percusiones tratadas con efectos de retraso (delay) y una inquietante línea melódica; "Europa" soberbia muestra de endiablado ritmo mixturado con una agónica secuencia de acordes, un bajo que es una ametralladora inmisericorde y unas guitarras soleando por alturas de vértigo junto a una voz violenta e inexplicable en términos de sensualidad que acusa en su texto a nuestro continente -sin piedad- de sus pecados históricos; "A sangre fría" cuyo inicio hermana mágicamente dos ritmos que en principio parecen repelerse cual imanes con polos iguales, para acabar desaguando en un riff apocalíptico y un muestrario de gritos belicosos que denuncian a un personaje poderoso y siniestro.


Lamentablemente (estamos en España señoras y señores) no hay edición en cd del vinilo original de 1986 aunque todavía es posible encontrar un cd doble que incluye este disco junto al segundo de Mercedes "Tengo todas las calles" de 1988, editado por Lollipop en 2001.


abuineitor

viernes, 21 de marzo de 2008

Andrés Sudón-Brujo




En esta sociedad enferma por el culto al éxito y al fracaso; al dinero y a la fama; al poder y al lujo; en este mundo ahíto de vulgaridad y empapuzado de cretinidad con irrespirables aires de señorío, digo, es de agradecer que de vez en cuando alguien se atreva a ser fiel a sí mismo y a jugar en el lado más colmado de penumbras y arriesgado del arte. En este sentido, esta es una de esas obras de rara belleza e intrincada asimilación, pero también indispensable manual para supervivientes de lo mediocre que nos rodea.

Meter una maceta en un cajón
es como hablar de la muerte despacio,
es mirar a la diestra contento,
sin tiento,
es amor destetado,
¿Qué lado no quiero si mañana la estiro?
¿A qué querer miro si muero?
Ya que espero callado lo hallado es cambiante,
lo poco gigante
y sudo natillas.
Y adiós al cemento del aire
que sólo me quiero vivir
para hacer requesón con la leche cortada,
para verme el risoreo desnudo,
para ir a aburrirme en El Viejo,
para dar la propina al Diablo,
para entrar en el interactivo parloteo infinitivo
que a ratos me gusta soltar,
para ser la cuestión o no ser,
para hablar de las viejas mentiras,
para hacerme un abanico con las tiras del
vestido que te sobra,
para ser una zorra buscando gallinas,
para curarme las anginas,
para echarte de menos -cabrona-,
para hacer alguna broma,
para, por, según, sin, sobre, tras,
la vida que has dejado se va...
Ah, Mariposa Gutural.
Ah, Mariposa Gutural.
A la hora de la lluvia somos uno,
somos sombra,
no se asombra si se asoma a lloverse mi nariz
(el patio de mi casa es recticular y como siga lloviendo se va a resquebrajar)
¿Qué lado no quiero si mañana la estiro?
¿A qué querer miro si muero?
Ya que espero callado lo hallado es cambiante,
lo poco gigante
y sudo natillas.

La primera vez que escuché hablar de Andrés fue en labios de Hilario Camacho quién me lo recomendaba cariñosa y encarecidamente como uno de los jóvenes cantautores más interesantes. Para quién no le conozca hay que decir que pese a su juventud, el salmantino Andrés Sudón lleva ya unos cuantos años actuando por toda España y grabando canciones en diferentes proyectos, sean estos discos o maquetas o bien discos comunitarios; por ejemplo, Andrés participó en la segunda entrega del mítico disco de Cantautores II, La Nueva Generación con la canción "Esternón" en 1998.

El disco que comento –Brujo- fue su segundo disco puesto que anteriormente había grabado otro titulado "Imaginación". A diferencia del primero que se grabó solamente con guitarra y voz y en una sola tarde (eso es eficacia) este segundo se hizo en algo más de tiempo –7 meses- y además contando con la colaboración de muchos músicos, y entre ellos, por supuesto, se encuentra su compañero de tantos conciertos y amigo Oscar J. Martín, siempre compenetradísimo su violonchelo con la voz y guitarra de Andrés y ayudando también en la dirección del proyecto.

1.- Viernes y medio
2.- Como beso a quemarropa
3.- Probemos en el mar
4.- El número tres
5.- Cantar de brujo
6.- Imaginación
7.- Alma azul
8.- Tengo aquello que nadie puede tocar
9.- Mariposa gutural
10.- De Otoño

Tratar de explicar el por qué de estas canciones sería como tratar de recoger agua con una cesta o como tratar de explanarse con lo que sucedió antes del segundo generador que precedió al nacimiento del universo. Me limitaré a citar las que más me gustan: como "El número tres" dulce tonada con la colaboración de otro genuino francotirador como es Carlos Chaouen; "Cantar de brujo" con aires árabes y programaciones y un metrónomo inquietante; "Imaginación" un milagro de sencillos versos y melancolías y percusiones con carácter; y por supuesto "Mariposa gutural" de la que arriba transcribí la letra entera, que ya el título lo dice todo, la cosificación más absoluta de la imposibilidad más exquisita hecha posibilidad sensitiva, vamos, que para mi roza lo increíble en el submundo cancioneril dicho sea lisa y llanamente. Y en el último tema, como guinda, recita un poema el poeta Antonio Colinas.

Antes de despedirme de este viaje musical me gustaría recalcar, por si no ha quedado claro todavía, que para mí, Andrés es uno de esos cantautores, como Pablo Guerrero, por poner el mejor ejemplo, en los que la poesía y la calidad de las letras resultan tan abrumadoras, que, a veces, uno pone en duda que lo que estemos escuchando sean canciones y no poemas musicados. Disfrútenlo.

abuineitor

domingo, 2 de marzo de 2008

Luis Eduardo Aute-Rito

Antes de comenzar a escribir sobre este disco, quiero hacer una aclaración, para que nadie se pueda llevar a engaño, comentando discos de Luis Eduardo Aute yo no soy objetivo. Todos los autores que a lo largo de los años me han gustado, me han influenciado en mayor o menor medida, tanto humanamente como en mi faceta de músico, pero estoy totalmente seguro que yo no entendería la música de la misma manera que la entiendo de no haber existido Aute.

No me quiero extender en detalles biográficos, ya que hay muchas y muy buenas biografías publicadas en Internet, pero a modo de anécdota podemos decir que Luis Eduardo llegó de forma casual al mundo de la música, ya que lo suyo era la pintura. Hasta ese momento, sus canciones o cantadas por otros o por él mismo habían tenido un gran éxito, lo que le proporciona bastante independencia y el compromiso, tanto de la compañía discográfica como del productor (el poeta José Manuel Caballero Bonald) de no tener que aparecer en televisión ni de dar recitales.

Con este disco, “Rito”, subtitulado “Canciones de vida y muerte”, editado en 1973, inicia la trilogía “Canciones de amor y muerte”, que completaría con los discos “Espuma” (Canciones eróticas) y “Sarcófago” (Canciones de muerte). Es para mi gusto el mejor de todos los discos de Aute, donde coinciden un aluvión de estupendas canciones. Efectivamente, esta es otra apreciación personal y por lo tanto subjetiva, pero no debo estar tan equivocado cuando treinta años después, entre los dos discos que editó bajo el título de “Auterretratos”, en los que hacía nuevas versiones de sus canciones más importantes, volvió a grabar diez de las quince canciones que están en el disco.

Los arreglos del disco y la dirección musical corren a cargo de Carlos Montero (magníficos para mi gusto). De las canciones, ¡qué podemos decir!, entre los títulos de este disco se encuentran varias de las más importantes y conocidas canciones suyas.

El disco comienza con una maravilla titulada “Quiero apurar cada grano de arena”, que personalmente tuve que esperar hasta 1984 para escuchársela cantar por primera vez en un concierto, fue en la presentación del disco “Cuerpo a cuerpo”:

Quiero beberme de un golpe la fuerza
tenue que apenas me sigue empujando
y alimentar olvidadas quimeras,
nubes dormidas, juguetes primarios,
oso de trapo, levántate y peca
desde tu polvo curado de espantos.”

A continuación viene “Rito de agujeros y cipreses”, un título más que sugerente, muy acorde a la temática del disco. Tras esta viene una de sus canciones más conocidas, “Dentro”, con una temática nada común y mucho menos en aquellos tiempos, ya que la canción habla de la masturbación:

Dentro
me quemo por ti,
me vierto sin ti
y nace un muerto.”

Continúa con “Amor” y después “Lecho de amor y de muerte” y a continuación otra de sus canciones más importantes, “De alguna manera”, que ya era una canción muy conocida, ya que había sido grabada anteriormente por Rosa León.

Termina la primera parte del disco (yo sigo pensando todavía en formato “Cara-A” y Cara-B”, que es como he oído este disco la inmensa mayoría de las veces) con “Estúpida manía circular”, que trata del paso del tiempo. Comienza la segunda parte con una dura canción “La mala muerte”:

“Muerte gula eterna, te invito a mi comida
Muerte hambrienta esposa, mi carne esta servida
Muerte boca sucia, devórame bonita
Mala muerte tengas, ¡ay!...
ay muerte de mi vida.”


La siguiente es otra magnífica canción, “Acaso”, una obra de arte con unos arreglos magníficos. La siguiente es “Mientras tanto amando”, una de las canciones del disco que más desapercibidas han pasado a lo largo de estos años y tras ella viene “Cuéntame una tontería”, una canción que produce un escalofrío al oírla, ya que en ella habla sobre la espera de la muerte, de forma distendida, pero por ello te estremece.

A continuación viene una de las canciones más importantes que se han escrito en la historia de la canción de autor en castellano, “Las cuatro y diez”, una mítica canción:

“Fue en ese cine, ¿te acuerdas?,
en una mañana al este de Edén,
James Dean tiraba piedras
a una casa blanca, entonces te besé.”

Como es lógico, tras esta maravilla, las siguientes canciones pasaron algo inadvertidas, como ocurrió con “Hay algo en el aire” y “Nada más que nada”, terminando con una inteligente canción titulada “Epílogo: Autotango del cantautor”, en la que Aute se ríe de si mismo en su faceta como “sesudo cantautor”.

En resumen, una maravilla de disco. Prueba de ello es que lo tengo tres veces, dos en vinilo y una más en CD.

Los títulos ordenados de las canciones son:

1- Quiero apurar cada grano de arena

2- Rito de agujeros y cipreses

3- Dentro

4- Amor

5- Lecho de amor y de muerte

6- De alguna manera

7- Estúpida manía circular

8- La mala muerte

9- Acaso

10- Mientras tanto, amando

11- Cuéntame una tontería

12- Las cuatro y diez

13- Hay algo en el aire

14- Nada más que nada

15- Epílogo: Autotango del cantautor

Por cierto, no creo que haga falta aclararlo, pero por si acaso, Luis Eduardo Aute firma todas las canciones, tanto la letra como la música.

Francisco Espinosa

lunes, 11 de febrero de 2008

Las Madres del Cordero-Todas sus grabaciones



Hace mucho tiempo que quería haber hablado aquí de este grupo mítico; tan mítico que solo duró un sencillo con dos canciones, porque lo que se ofrece en este cd de Ramalama, en realidad consiste en una labor de búsqueda y captura y afortunada recuperación de maquetas (que se publicaron en su momento sin el consentimiento del grupo) y de alguna que otra canción mucho más reciente firmada e interpretada por Moncho Alpuente, el alma mater de la banda, y por supuesto de la segunda reencarnación de "Las Madres" que se llamó "Desde a Santurce a Bilbao blues band". ¿ Y por qué editaron solamente un sencillo? pues sencillamente, nunca mejor dicho, porque el grupo formaba parte de ese también mítico montaje teatral llamado "Castañuela 70" detrás del cual se hallaban Juan Margallo y demás compañeros del grupo teatral independiente Tábano, y, al igual que el montaje fue prohibido -estamos en 1970 en España- Las Madres del Cordero fueron censuradas y decidieron cambiar de nombre.

En el grupo musical ejercía de ideólogo y director de orquesta el por mi muy querido Antonio Gómez poeta y escritor de gran finura, primer historiador del cantaurismo nacional, y que ha trabajado en muchos y grandes medios de comunicación de este país, que ha colaborado -generosa y muy sabiamente- en este blog en varias ocasiones, y que es también autor de sobresalientes letras para cantautores de la talla de Hilario Camacho o Antonio Resines (que no es el actor por cierto).

El grupo tomaba su genial nombre de Frank Zappa & The Mothers of Invention dado que eran admiradores de ellos, así como de Jimi Hendrix o Pink Floyd, algo muy mal visto entonces en el mundo de los cantautores, que, como mucho, estaban dispuestos a escuchar a Pete Seeger y prau que diría mi abuelo. Con el sr. Zappa compartían afinidad de nombres y gusto por la sátira y la mordacidad, sin embargo, musicalmente hablando, y salvo algún que otro blues, "Las Madres" sonaban muy nuestras, muy folklóricas -en un sentido nada peyorativo de la palabra; echando mano de instrumentos acústicos y de tonadas muy españolas. De echo, uno de sus mayores éxitos -ya como Desde Santurce a Bilbao blues band- "El hombre del 600" más parece una tuna universitaria que un grupo folk; desde luego ni por asomo uno de pop o de rock. Lo bueno sin embargo son la letras. En gran medida responsabilidad del ingenioso, taimado y divertidísimo Moncho Alpuente, que firma la mayoría. Para muestra un botón: el ya mitológico y primigenio primer sencillo del grupo que incluye las letras de "A beneficio de los huérfanos" y "La niña tonta de papá rico" canción esta última emparentada en temática con ese blues tan jazzy "Les paumes du petit matin"de mi siempre admirado Jacques Brel.

Dentro del repertorio se encuentran también dos canciones de Luis Eduardo Aute que formaban parte también de cuadros de Castañuela 70: "Los fantasmas" y " Canción consumo". Y como muestra de que los miembros de "Las Madres" no solamente eran críticos sino en gran medida autocríticos, también cantan una canción que ironiza con las letras sociales y sus autores: " Al cantante social con cariño" antes de que lo hiciera Georgie Dann -que lo hizo, en una canción- el incombustrible rey de las horteradas veraniegas hasta que llegara el entrañable rock duro agropopero de El Koala.

Que yo sepa, estas canciones, a diferencia de la obra teatral de la que formaban parte, no han sido reivindicadas por nadie. En cualquier my space de cualquier grupo o artista españoles aparecen listados interminables de las influencias que inciden en su manera de entender la música y en la mayoría todo son listados de artistas anglosajones y raramente alguna referencia de otros países. En fin, son los tiempos que vivimos. Sirva esta modesta reseña para reconocer la impagable habilidad de "Las Madres del Cordero" para golear en primera convocatoria a la censura como lo hicieron; sin groserías y sin insultos, sin crispaciones y sin chabacanerías; en una palabra: con inteligencia.

Chapeau, Madres, chapeau.


COMPACT DISC - 1


1 A BENEFICIO DE LOS HUÉRFANOS
2 LA NIÑA TONTA DE PAPÁ RICO
3 LOS FANTASMAS
4 CANCIÓN CONSUMO
5 AL CANTANTE SOCIAL CON CARIÑO
6 YO QUIERO SER (PEQUEÑO BURGUÉS)
7 A PESAR DE TODO
8 DIFFERENT
9 LOS FANTASMAS / DANZA DE LOS ORANGUTANES
10 TODO ESTÁ
11 LAS COSAS VAN CAMBIANDO
12 SOY LA MUJER (CON MASSIEL)
13 EL HOMBRE DEL 600
14 NO SEA USTED ORIGINAL
15 INDEFENSOS VAMPIROS
16 SUPERMAN
17 A BENEFICIO DE LOS HUÉRFANOS / DIFFERENT (CIERRE)

COMPACT DISC 2


1 CAMPANERA
2 PEQUEÑO BURGUÉS (YO QUIERO SER)
3 MUCHACHO NO PIENSES TANTO
4 AL CANTANTE SOCIAL CON CARIÑO
5 PRESENTACIÓN / VIVA EL ROCK,EL BEAT, EL SOUL Y TODO LO DEMÁS
6 TRISTE ESTÁ LA CIUDAD
7 A PESAR DE TODO (DESPEDIDA)
8 EL ÍDOLO (VERSIÓN 2005)
9 LAS COSAS VAN CAMBIANDO (VERSIÓN 2005). CANTA MONCHO ALPUENTE
10 LAS COSAS VAN CAMBIANDO (VERSIÓN 2005). CANTA CURRO FATÁS
11 EL HOMBRE DEL 600 (VERSIÓN 2005)

abuineitor

miércoles, 6 de febrero de 2008

Joan Isaac-La vida al sol




Joan Isaac es una de las grandes voces de la Cançó. Este disco que comento fue presentado el 18 de Enero en Barcelona, en L´Auditori, en un concierto al que yo puse asistir. El público de Joan Isaac es un público fiel, que conoce su obra y su trayectoria, y que sabe que nunca defrauda en sus actuaciones. Este concierto tenía además un valor añadido, se presentaba un disco muy emotivo para sus seguidores, y como no podía ser de otra manera, el artista se volcó con el público, acompañado por un sexteto de músicos de lo mejor, entre ellos Enric Colomer al piano y Pere Bardagí al violín. Un gran concierto, reconocido en los días posteriores por todos los críticos especializados.

Las canciones de “la vida al sol” tienen un color especial, aunque básicamente cumplen con la línea a la que nos tiene acostumbrados como compositor, en su esencia son diferentes, porque surgen de un cambio fundamental en la vida del cantautor. Hace dos años, justo cuando se publicaba su anterior disco “De profundis”, Joan Isaac sufrió un infarto del que afortunadamente se recuperó, y este disco del que hablo es la manera en que el artista da gracias a la vida por darle una segunda oportunidad; se salvó por la campana, lo dice en el tema principal, que escribió estando todavía en el hospital:

“Si, per atzar,
La vida entén
Que és massa cruel morir-se aviat,
I va i et salva la campana
Vés-hi i abraça-la……..
I estrena, amor, la vida al sol”.

(Si, por azar, La vida escribe Que es demasiado cruel morirse pronto, Y va y te salva la campana…Ve y abrázala….. I estrena, amor, la vida al sol.).

Como en todos sus trabajos, en este disco el autor le da un repaso a la esencia de la vida. En “De profundis” se introducía en las profundidades, en los abismos de los sentimientos; aquí en “La vida al Sol” se detiene en las cosas sencillas que lo rodean y que nos rodean a todos, la familia, los hijos, la belleza de las cosas simples, el mar, la música, pero no se olvida de las trampas de la vida.

“Breu Cançó d´amor per a dues filles” y “Conec un lloc” son dos temas dedicados a su universo familiar, en ellos, de la manera más bonita, deja claro lo que de verdad tiene importancia en la vida cuando la vida se pone en juego. También lo deja ver en “Quina calma més gran que em dona la mar”, “Per envellir demano poc”, “Música” y en su tema principal “La vida al sol”, pero en éstas lo hace desde un punto de vista íntimo y personal, poniendo por delante que en realidad, en la vida, la única compañera de viaje es la soledad.

Pero como decía antes, no se olvida de las trampas de la vida, de los deseos y de las circunstancias que se imponen sin pedir permiso, y no se puede hacer nada para evitarlo. Dos canciones que me gustan especialmente van en esa dirección: “No hi ha res urgent” (Nada hay urgente) y No s´hi pot fer res” (No se puede hacer nada).

En la obra de Joan Isaac son fundamentales las letras, pero también lo son las músicas, que acompañan los temas de una manera natural, dándole a cada canción una identidad peculiar.

Si tuviera que destacar una canción del disco, tiro para mi tierra. Entre todas, yo me quedo con una, “Digue´m que no m´estimes”, o lo que es lo mismo “Dime que no me quieres”. Es una canción que tuvo mucho éxito en el concierto, muy aplaudida por un público que se puso varias veces en pie en el teatro y que tuvo que volver a cantar en los bises. Le acompañaba en el concierto, y también en el disco, una artista flamenca, una nueva voz, Alba Guerrero, una canción con aires flamencos con la que acabo mi comentario:

“Jo no voldria estimar-te,
Per no trobar-te a faltar,
Ni dir-te adéu i penjar-te,
I poc després tornar a trucar.

Jo no voldria enyora-te
Si t´he deixat fa uns instants,
Ni vull fer mil tombarelles
Si d´improvís t´estic besant.

Digue´m que no m´estimes
Digue´m que no.
Digue´m que no em desitges,
Digue´m que no.
Que em fa més por estimar-te
Que emmalaltir del cor.
Digue´m que no.”

“La vida al Sol” ha sido publicada por Discmedi en enero de 2008. Todas las letras y músicas compuestas por Joan Isaac, a excepción del tema “I jo al meu racó”, adaptación libre al catalán del tema “Et moi dans mon coin” de Charles Aznavour.

Canciones del disco:

Que tramposa és la vida
Breu cançó d´amor per a dues filles
La vida al sol
No hi ha res urgent
No s´hi pot fer res
Música
Digue´m que no m´estimes
Dona d´aigua
Conec un lloc
I jo al meu racó
Quina calma més gran em dona la mar
Per envellir demano poc

María Gracia Correa

jueves, 3 de enero de 2008

Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzman-CRAG 1985




Tengo bien reciente un concierto –por fin- al que acabo de ir para ver en directo, en la sala Segundo Jazz, a Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán. Lo cierto es que pasé gran parte de la velada en un estado, medio de ensoñación, medio alucinatorio y no precisamente por las cervezas que me había tomado, sino porque me parecía mentira que aquello se estuviera produciendo, ahí, delante de mi, los cuatro CRAG, tan cerquita y tan sonrientes, rodeados de gente que se sabía todas sus canciones. En fin, un encantador sueño cumplido que disfruté muchísimo, acompañado de mis buenos amigos Chema Lara y Víctor Alfaro

Pero como este blog es de reseñas de discos no voy a comentar el concierto, sino uno de sus discos, que aunque es de 1985, se trata realmente del último que grabaron juntos los cuatro. El año anterior se grabó el segundo, siendo el primero "Señora Azul", el gran mito. El que hoy nos ocupa tiene por título precisamente "CRAG 1985" como el año en que se grabó, siendo producido por el propio cuarteto y José A. Alvarez Alija, con un sonido muy acorde con los años en que se grabó, con percusiones electrónicas, programaciones, sintetizadores etc pero también con pianos y guitarras de las de siempre.

01.- Necesito tenerte
02.- Le recomiendo
03.- Elizabeth
04.- Nada que ocultar
05.- Igual que una noria
06.- Rafa
07.- Espejito mágico
08.- ¿Dónde estás?
09.- Culpable
10.- 1985: los blues

Así a bote pronto diré que, pese a lo angelical de sus melodías, y pese a lo suave y elegante de sus voces, el contenido es lo que hoy decimos políticamente incorrecto. Ja, ja, ja, que tíos, algún diablillo burlón debió de inspirarles estas maravillosas canciones. La primera es una bonita canción de amor con aires muy pop, pero la segunda, por ejemplo, es una invitación al adulterio, así, sin tapujos.

"Le recomiendo echarse al aire una cana,
Seguir viviendo, sin esperar a mañana;
Y no le importe el típico vituperio.
Cambie el rumbo: ¿ha probado el adulterio?"

La tercera constituye un canto a la eutanasia en toda regla; a la eutanasia y a la libertad de elegir el propio destino. La cuarta, una comprensiva declaración de apoyo hacia la homosexualidad... la sexta habla de un personaje peculiar que encima es un cantautor sin futuro, ja ja, estos CRAG no dejan de sorprenderme. Un par de canciones dedicadas a la soledad y después una dedicada a un ser humano absolutamente marginal, de esos que viven intensamente el día a día en las infernales subculturas, o mejor dicho -infraculturas- de las drogadicciones. Y por último, y no por ello menos interesante, que diría un anglo, un blues dedicado a un mediocre perdedor con tendencias suicidas (o al menos esa es mi lectura de la letra).

Increíble muestrario de figuras periféricas y a veces excéntricas de esas que pululan por nuestra vida y nuestra sociedad y a las que la mayoría de las veces no prestamos la atención que se merecen. Chapeau! Maestros, amigos de CRAG, chapeau! Os deseo que sigáis como siempre, dándole vueltas a la cotidianeidad, a nuestro día a día "igual que una noria". Y por favor, ¡grabad más discos!!!!.

abuineitor