sábado, 6 de junio de 2009

Javier Maroto - Al revés



Después de escuchar “Luz”, su primer disco, esperaba con ganas la salida de este segundo disco, ya que había escuchado alguna de las canciones que irían en él y me habían parecido magníficas. Después de aquel primer disco, en el que la producción musical había estado cuidadísima, este “Al revés” ha sido grabado íntegramente en Argentina, por músicos de primera línea: Leandro Savelón (Batería), Fernando Guevara (Percusión), Fernando Botti (Bajo y contrabajo), Martín Masi (Piano, teclados, acordeón y coros), Ariel Cubría (Guitarra eléctrica, acústica y coros), Virginia Álvarez (violín), Pablo Greco (Bandoneón) y Hernán Paredes (Scratch), con la colaboración al piano y la voz de Sebastián Monk en “Problemas”.

Las canciones del disco son:

1- Cuánto tiempo
2- Alicia quiere a Marta, Ernesto ama a Andrés
3- Al revés
4- El barco y la mar
5- Números
6- Pregunta
7- Las venas abiertas
8- Problemas
9- Siete veces crucificado
10- Edad
11- Tango electoral

Un disco cargado de temática social, donde Javier reivindica el amor homosexual en “Alicia quiere a Marta, Ernesto ama a Andrés” o incluso la teología de la liberación en “Siete veces crucificado”. En “Al revés”, la canción que da título al disco, nos plantea cómo sería el mundo si muchas cosas no fuesen como son:

“Qué pasaría si por una vez no estuviera de moda
Acomodarse en no pensar de más,
Vivir según las normas,
Saber menos chismes, más de economía,
Mucho menos fútbol y más geografía,
Saber más de mí, menos de vos.”

La cuidada producción musical hace que el disco sea extraordinariamente digerible, por lo que tienes que estar muy atento a que no se te pase ni una sola palabra de las muy cuidadas letras. Javier apuesta sin ambigüedades por la solidaridad, la justicia y la persona como persona propiamente.

En “números” nos presenta un genial juego de palabras con números:

“y las 7 maravillas,
Los 3 cerditos, los 7 enanitos,
9 reinas, 2 hombres y 1 destino,
400 golpes…”

Para al final decirnos que “tristes números si no es amor la empresa, tristes números”.

En resumen, un magnífico disco, trabajadísimo, donde Javier Maroto pone a nuestra disposición su mayor sensibilidad y su maestría a la hora de confeccionar y ejecutar canciones.




Francisco Espinosa