domingo, 24 de junio de 2007

Andres Calamaro-Alta suciedad




Siguiendo el hilo del comentario escrito por Antonio Gómez sobre Carlos Montero y los cantautores que emigraron a nuestro país a empezar o recomenzar una carrera artística me decido a escribir éste. Y es que es un buen ejemplo, quizás el que mayor éxito ha logrado dicho sea de paso, de carrera retomada en España, por un artista foráneo. Corría el año 1990 cuando Andrés Calamaro hace las maletas para venirse a Madrid en gran medida huyendo de la hiperinflacionada situación económica de Argentina. Al llegar aquí, se une a Ariel Rot, argentino como él y ex_Tequila, a Julián Infante, otro ex_Tequila, y a Germán Vilella, para formar el popular grupo de rock Los Rodríguez. Aunque el origen del grupo es previo, creo. Recuerdo que por aquellos años –quizás un poco antes- Julián, a quién tuve la suerte de conocer, me invitó, y al grupo en que yo tocaba entonces, a un concierto de varios grupos al aire libre en que iba haber participado él, pero justo ese día venía Ariel Rot de Argentina en avión y Julián se fue a buscarle (estaba muy ilusionado con verle porque hacía mucho que no lo veía) y al final no aparecieron ninguno de los dos.

El caso es que tras unos años de gran éxito el grupo se separa y Andrés, que ya había grabado varios discos en solitario antes de venir a nuestro país, vuelve a grabar de nuevo con su nombre, lo que, en rigor, se puede considerar su primer disco en solitario en España. Sin embargo, la grabación del disco, no se llevará a cabo aquí; se hará a caballo entre Nueva York, Nueva Jersey y Miami, con el productor de Los Rodríguez , Joe Blaney, y con músicos negros curtidos en grabaciones de Aretha Franklin, Tom Waits, John Lennon, etc. Así pues, éstos, imprimirán su sello y su natural alma negroide, musicalmente hablando claro, a la bigarrada propuesta de Calamaro, lo que hace que sus canciones a ritmo de funk y de rock, de zydeco y soul, rumba y tango, reggae y psicodelia, folclor y tex-mex, cobren una extraña unidad y coherencia, gracias a su labor y a la característica voz de Andrés, omnipresente.

Temas:

1. Alta suciedad
2. Todo lo demás
3. Donde manda marinero
4. Loco
5. Flaca
6. Quién asó la manteca?
7. Media verónica
8. El tercio de los sueños
9. Comida china
10. Elvis está vivo
11. Me arde
12. Crímenes perfectos
13. Nunca es igual
14. El novio del olvido

Personalmente creo que de los que he oido hasta la fecha, este es el mejor disco que ha parido. El sonido se erige como una torre enladrillada con exóticas delicias y la dignidad y la clase de las canciones no decae jamás. Desde “Flaca” ese homenaje a su admirado Dylan (por no hablar del aspecto del cantautor en la portada y fotos interiores cual Dylan de los años setenta) pasando por la hermosa, poética y triste “Media verónica” o la irónica ranchera-blues de “El tercio de los sueños” hasta la fina joya, el delicado tesoro del disco que, para mi gusto constituye “El novio del olvido”, este es un cáliz musical del que se apura hasta la última gota sin darse uno cuenta. Mención aparte merecen las apariciones estelares de Palito Ortega (sí, el de “la felicidad oh oh oh oh...”) o del profesor universitario y afamado conocedor del mundo cultural de las drogadicciones Antonio Escohotado (por cierto que fue profesor mío, un tipo muy interesante) que se marca una larga parrafada locutada sobre un pastoso reggae de casi ocho minutos.

Ya dije que hasta la fecha para mí es lo mejor que ha hecho Andrés. Un cd que satisface plenamente tanto al cantautor que creo que hay en mi, como al rockero que me identifica. Un disco irrepetible y que creo contrasta -para bien- con lo que en los últimos tiempos ha hecho, volcado como está en el universo de las versiones de clásicos a las que siempre ha sido tan aficionado (comentábamos mi amigo Alejandro Romano y yo que no a todos les ha gustado mucho sus revisiones de canciones tan populares, más de un argentino ha debido decirse así mismo aquello de “si el Polaco Goyeneche levantara la cabeza...”). Pero bueno, pese a todo, sigo pensando que todavía puede superar este gran disco “Alta suciedad”. Talento y sabiduría le sobran, sin duda...

abuineitor

1 comentario:

Romano dijo...

Coincido contigo Carlos que alta suciedad ha sido el mejor disco de Calamaro post Rodriguez,aunque la epoca de "Los Abuelos de la nada" es para no olvidar donde fueron sus comienzos....

Su disco de Tangos ??? para el olvido,,,que no lo escuche El Polaco,,,jejeje

Abrazos transoceanicos